Industria 4.0, el inicio de una nueva era tecnológica e inteligente

La adaptación es la clave para poder entender la importancia de la transformación intrínseca de la industria 4.0, un término que aún sigue generando preguntas y rechazo, puesto que no todos están preparados para adoptarla. A ciencia cierta, tengo la idea de que mientras más nos acercamos a los ideales de vida que queremos –desde un punto de vista tecnológico y productivo–, más ambiciosa se vuelva la necesidad de crear nuevas formas de automatización y agilización de los procesos en las que el humano participa, un hecho que ya se puede ver en cosas tan simples como los sistemas de información o en la robótica.

Por desgracia, en esta búsqueda por innovar, siempre habrá varios obstáculos que se deben enfrentar para poder dar el paso a una nueva era de industrialización, y, sin duda alguna, uno de esos retos son las personas reacias al cambio. Es evidente que este proceso supone muchos retos a nivel operativo –las grandes empresas deben reestructurar sus funciones actuales para poder adaptar las nuevas tecnologías de una forma eficiente y rápida–, pero también psicológico, debido al impacto que puede tener en la forma de pensar y actuar de los empleados. En los años que he tenido la oportunidad de trabajar en el mundo de la inmersión a través de la aplicación de realidad virtual, realidad aumentad y realidad mixta, y con ella he enfrentado el reto que supone el cambio tan acelerado de los paradigmas de gestión de tecnología y su aplicación en la industria.

Día a día, las personas deben enfrentar este hecho con la premisa de que «los cambios son positivos», y a pesar que aplico esta filosofía en cada uno de mis proyectos, estoy consciente que el cambio puede generar una reacción en cadena que en ocasiones no es posible medir. En una oportunidad leí una frase de Richard Beckhard que dice que «el problema en la mayoría de los cambios es que se choca con ellos por la parte que no está a la vista». En ese momento no entendí a qué quería llegar Beckhard, pero luego de repetir la frase en mi mente, pude ver a qué se refería este importantísimo consultor de gestión del cambio: la única forma de garantizar que el cambio genere resultados positivos, y con ello se consiga el anhelado éxito, es por medio del análisis detallado de todos aquellos aspectos que no están explícitos –o como dice él, que no están a la vista. ¿A qué quiero llegar con todo esto? ¿En qué se relaciona con la industria 4.0? Que el mayor obstáculo de la cuarta revolución industrial es la poca importancia que se le da a la evaluación de todos los efectos secundarios que vienen luego del cambio.

El cambio hacia la industria 4.0

Para las nuevas generaciones, la industria 4.0 es un término común con el que han tenido que crecer y aprender, pero para aquellos que crecieron durante la industria 3.0 o la 2.0, la historia es totalmente diferente. El cambio tan acelerado de la tecnología y los modos en que se maneja el mundo, han llevado a las grandes empresas a crear nuevas formas de realizar las tareas antiguas, pero con un menor gasto de recursos. Además, la aplicación de la cuarta revolución industrial supone una oportunidad para minimizar el porcentaje de accidentes laborales que suelen ser muy comunes en las empresas dedicadas a la manufacturación y fabricación de productos.

Componentes aplicables de la industria 4.0

Sin importar a qué se dedique una empresa, la mejor forma de iniciar en este nuevo y acelerado panorama industrial es por medio del estudio de ciertos componentes claves, aplicables a cualquier ambiente laboral, ya sea por medio de la implementación de una analítica predictiva –de modo que se saque todo el provecho a los datos de producción–, el entrenamiento virtual de los empleados para que amplíen sus habilidades en base a las problemáticas actuales y muchos otros aspectos que pueden incluir algunos de los siguientes componentes:

  • Sistemas ciberfísicos: estos sistemas son los ideales para flexibilizar la sucesión de valor desde la fase de producción hasta la fase final en donde se encuentra el consumidor.
  • Máquinas inteligentes: la idea preconcebida en las películas de robots que vuelvan al pasado a cambiar la historia de la humanidad han quedado en el caso gracias a los robost inteligentes. Estas máquinas pueden interactuar con su ambiente y percibir cuando están en presencia de un humano por medio de sensores de movimiento. Además, si se utilizar para trabajos repetitivos y estructurados, son una de las mejores opciones para mejorar la productividad y ahorrar costos de mano de obra –así como reducir la probabilidad de error que pueda surgir durante el trabajo.
  • Big Data: el uso del término no es nuevo, en especial para las empresas del siglo 21 que manejan grandes volúmenes de información estructurados, no estructurados y semiestructurados, los cuales pueden ser utilizados para obtener información de utilidad para la empresa.
  • Factoría 4.0: hace referencia a las empresas que requieren una conexión total en el proceso de fabricación de un objeto, ya sea para la toma de decisiones a nivel técnico como para la elección de las tecnologías que se emplearán (un ejemplo de ello puede ser el uso de sensores, máquinas inteligentes, impresoras 3D, entre otras).
  • Manufacturación virtual: en este tipo de aplicación las empresas podrían crear simuladores virtuales para probar o testear el proceso de manufacturación de prototipos nuevos en poco tiempo, facilitándole a los empresarios información vital.
  • Interacción de calidad: la posibilidad de conectarse con el mundo virtual desde el mundo físico es una posibilidad si se cuenta con un buen sistema de interacción.
  • Energía eficiente (también llamada energía limpia o energía verde): es un tipo de energía descentralizada que se adapta perfectamente a los requisitos y problemáticas que presenta el mundo en la actualidad, como es el caso del cambio climático, entre otros.

Es vital aclararte que los componentes claves de la industria 4.0 no se adaptan a cualquier proyecto. Las grandes empresas no suelen tener problema con la implementación de la mayoría de las opciones que propone la cuarta revolución industrial, puesto que cuentan con un capital flexible que les permite tomar riesgos y experimentar con nuevas formas de gestión empresarial.

Realidad virtual y la realidad aumentada aplicada en la industria 4.0

Los proyectos que incluyan realidad virtual o realidad aumentada son una de las mejores formas que puede aplicar una empresa para hacer la transición hacia la industria 4.0 con pie firme. El camino hacia la digitalización de todos los procesos o de un proceso en específico de la empresa, puede tomar meses y mucho dinero si no se sabe cómo aprovechar, pero si decides incluir elementos de ambos entornos, es posible aprovechar los aspectos más relevantes de ambas tecnologías para aportar alguna utilidad en la optimización de uno o más procesos, como, por ejemplo: mejora de diseños, control de planta, mantenimiento de planta, asistencia ante incidentes (incluyendo su respectiva resolución para preparar al individuo en los pasos que debe seguir) y muchas otras cosas más.

Conclusión

La aplicación de nuevas tecnologías en los procesos industriales es inminente. En la década pasada la aplicación de tecnologías avanzadas como la robótica, sistemas de simulación, Big Data, ciberseguridad, realidad virtual, realidad aumentada, realidad mixta, sistemas de integración, 3D y muchas otras más, fue el inicio de lo que hoy engloba el concepto de industria 4.0., y por suerte, aunque el término siga generando dudas, desde hace años que muchas empresas en el mundo están apostando por estos nuevos paradigmas. ¿Por qué no hacerlo? Te pregunto. La optimización de procesos, mayor productividad de los empleados, reducción de costos de manufacturación de prototipos de productos, el manejo de información en tiempo real y muchos otros aspectos son parte del sistema actual de muchas empresas y ante esta marea de oportunidades laborales, más de un emprendedor o empresa nueva se ven tentados a seguir los pasos y cambiar el modo en que operan su empresa de forma positiva: por medio de la aplicación de tecnologías de punta.

Escrito por: Johnny Aguirre Salazar
CEO WOW Emotions
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